jueves, 25 de febrero de 2010

Chori


El choripán es tal vez la expresión más argentina, o rioplatense —aunque en rigor de la verdad, se consume tradicionalmente en varios países de Latinoamérica—, de la comida rápida. En nuestro país, la versión (?) más popularizada del choripán es la conocida como “chori mariposa”, que no tiene tanto que ver en este caso con la orientación sexual del consumidor (?), sino con la forma de cortar y disponer el embutido entre el pan, que recuerda las alas de una mariposa. O una letra X.

Hay que reconocer que en algunas cosas, los brasileños están mucho más avanzados que nosotros. En las playas de Florianópolis (Santa Catarina), carritos recorren la arena vendiendo choripanes y sánguches. Pero además de asarlos a la parrilla (o grelha, en portugués), los preparan sobre una plancha, donde además les agregan queso fundido y cebolla salteada.

Por lo general, el dressing (?) o aderezo por excelencia para el chorizo es el chimichurri, cuya masividad deja poco espacio para nuevas ideas. Pero anímense a probar ésta: en una compotera, cebolla picada bien finita —o rallada— con bastante jugo de limón. Especialmente recomendada si el chori es de cerdo.